
Una de las medidas más importantes esta enfocada en los compradores de nuevos coches, ya que los consumidores recibirán 2.000 euros para adquirir un nuevo coche, con la mitad del dinero ofrecido por los gobiernos central y regional.
Al mismo tiempo, el primer ministro confirmó que serán aplicados nuevos cortes impositivos para los negocios pequeños y posiblemente un plan para reducir la impresionante cantidad de casas nuevas sin vender.
Además, intentando poner a su gobierno en línea, Zapatero anunció que se realizarán nuevos cortes en los gastos públicos, que podrían llegar a los mil millones de euros.
Durante la conferencia anual sobre el estado de la nación, Zapatero culpo a la dependencia de España en los sectores de construcción e inmobiliario por la profundidad de la crisis, pero también dijo que existen algunas señales de mejora.
Hablando frente al parlamento en Madrid, el primer ministro dijo que las compañías automotrices proveerán 1.000 euros de subsidio por cada coche nuevo, mientras que 500 euros serán otorgados por el gobierno central y los otros 500 por el gobierno regional.
Sin dudas este tipo de estimulo no es una gran sorpresa, considerando que el sector automotriz español es el tercero más importante de Europa, abarcando cerca del 10% de la producción económica total del país.
Tenemos que recordar que el banco central español anunció en enero que el país se encontraba en recesión económica por primera vez desde 1993, siguiendo dos trimestres consecutivos de crecimiento económico negativo.
Dentro de la crisis el punto más duro para España ha sido el desempleo, que se ha duplicado en los últimos 12 meses, alcanzando el 17.4% y convirtiéndose en el nivel más alto de la Unión Europea.
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